Cada vez más, las familias propietarias de empresas desarrollan políticas de empleo familiar para ayudar a los miembros de la familia a entender su relación con la empresa. Aunque estas políticas difieren de una familia a otra, hay varios principios que maximizan los resultados tanto en el rendimiento empresarial como en las relaciones familiares. Estas políticas no sólo ayudan a la familia propietaria de la empresa, sino que también pueden servir para aclarar las expectativas de todos los empleados de la familia.

Implicar a los miembros de la familia en la empresa puede producir resultados positivos. Los empleados dicen sentirse orgullosos y conectados cuando trabajan junto a los miembros de la familia. En el mejor de los casos, la participación de varios hermanos puede producir una cultura de presión positiva entre iguales, en la que los miembros de la familia tratan de enorgullecerse mutuamente, apoyando el éxito de los demás. Desde el punto de vista de la empresa, la participación exitosa de múltiples miembros de la familia propietaria tiene más probabilidades de producirse cuando existen criterios de empleo claros y rigurosos y cuando la alta dirección aplica líneas claras de autoridad, responsabilidad y revisión periódica del rendimiento. Las mejores prácticas que las empresas familiares de éxito incluyen en sus políticas de empleo familiar son las siguientes

  • La familia propietaria no debe pedir a otros que hagan lo que ella no hará por sí misma.
  • Los miembros de la familia están sujetos a unas expectativas definidas de formación y experiencia laboral externa antes de incorporarse a la empresa a tiempo completo.
  • Los miembros de la familia no informan a nadie que esté relacionado con ellos por sangre o matrimonio.
  • Los niveles de compensación se basan en el valor "de mercado".
  • Las prácticas de revisión periódica del rendimiento, como la retroalimentación de 360 grados, se utilizan para garantizar una retroalimentación adecuada.
  • Se establecen objetivos cuantificables, basados en la información que se utilizará en futuras evaluaciones de rendimiento.

Incluso las mejores políticas pueden no contemplar todos los escenarios posibles cuando se trata de emplear a varios miembros de la familia en una empresa. ¿Deben hacerse excepciones a efectos de la sucesión en la dirección? ¿Debe un hermano dejar el departamento cuando una hermana o un hermano trabajan juntos y uno de ellos es promovido a un puesto de supervisión por encima del otro? ¿Cómo se toman estas decisiones?

Algunas empresas familiares crean un Comité de Empleo Familiar que revisa las decisiones de personal relativas a todos los propietarios familiares empleados y a cualquier empleado relacionado por sangre o matrimonio. El comité puede reunirse cuando sea necesario, y puede ser de carácter consultivo o tener la facultad de revisar y modificar las decisiones. Los miembros del comité pueden ser uno o dos propietarios familiares empleados, uno o dos empleados no familiares de alto nivel que estén por encima de la política familiar, un propietario familiar no empleado en la empresa y un miembro externo del consejo de administración. Otro enfoque sería crear una oficina especial de "ombudsman" que entrene y asista en la resolución de escenarios de empleo familiar, como los descritos anteriormente.

Emplear a varios miembros de la familia puede ser una fuente de fortaleza y disfrute, si las expectativas se establecen claramente entre los implicados. Nuestra experiencia demuestra claramente que quienes reconozcan esta necesidad de claridad y apliquen prácticas positivas, tendrán menos problemas para gestionar a los miembros de la familia y su relación en la empresa.